Sheinbaum: México no fue informado de deportación de mexicano a Sudán
La presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que al gobierno de EUA no informar sobre la deportación del mexicano Jesús Muñoz Gutiérrez a Sudán del Sur.
CIUDAD DE MÉXICO.- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que el gobierno estadounidense no notificó a las autoridades mexicanas sobre la deportación del connacional Jesús Muñoz Gutiérrez a Sudán del Sur, en un hecho que ha provocado indignación diplomática y cuestionamientos al protocolo migratorio de Estados Unidos.
¿Qué ocurrió con Jesús Muñoz?
Jesús Muñoz Gutiérrez, ciudadano mexicano condenado en Estados Unidos. por homicidio, fue enviado la noche del martes a Sudán del Sur junto con otros siete migrantes de Cuba, Laos, Birmania, Vietnam y Sudán del Sur, todos con antecedentes criminales considerados “especialmente monstruosos”, según las autoridades estadounidenses.
La portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Tricia McLaughlin, explicó que:
“Ningún país en el mundo quería aceptarlos porque sus crímenes son especialmente monstruosos (…) pero gracias al Departamento de Estado encontramos un país que estaba dispuesto a aceptarlos”.
Sheinbaum exige claridad y respeto a protocolos
Durante una conferencia de prensa, Sheinbaum denunció:
“Estados Unidos no informó a México sobre la deportación de este ciudadano, y no siguió el protocolo especial que se aplica cuando una persona mexicana está privada de su libertad en el extranjero”.
Claudia Sheinbaum enfatizó que este tipo de traslados exige una coordinación diplomática y de seguridad específica, muy distinta a la deportación de personas que no están bajo custodia penal.
Además, la mandataria adelantó que el gobierno mexicano buscará ubicar a Jesús Muñoz Gutiérrez en Sudán del Sur para confirmar si desea ser repatriado. En caso afirmativo, Estados Unidos deberá regresarlo a México, donde se analizarán los protocolos de detención y custodia conforme al marco legal nacional.
Violaciones al protocolo internacional
Este episodio ha abierto un nuevo frente diplomático entre México y Estados Unidos, pues revela una posible violación a los protocolos internacionales de repatriación y respeto a los derechos consulares. La ausencia de notificación por parte de EUA ha sido calificada como grave omisión diplomática.
El caso se vuelve aún más complejo por el hecho de que una orden judicial en Boston había prohibido entregar a los deportados a Sudán del Sur, aunque esta llegó cuando el vuelo ya se había realizado.
